Ya empiezan a notarse los efectos positivos de las vacunas contra el coronavirus Covid-19 en Estados Unidos. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Universidad Johns Hopkins confirmaron la tendencia a la baja de la cifra de contagios en todo el país, lo que sitúa el índice de enfermos en el más bajo registrado desde el pasado mes de octubre.
Redacción Negocia en Miami.-
El domingo se contabilizaron unos 64.000 nuevos contagios, lo que permitiría vislumbrar algo de esperanza en el plan de vacunación masiva que impulsó la Casa Blanca y las medidas de contención suscritas por las administraciones estatales y locales para evitar brotes de infección.
La cifra diaria de contagios llegó a estar por encima de los 200.000 casos nuevos diarios en el mes de diciembre. La situación empeoró en enero, justo unos días después de las fiestas de final de año, cuando el número promedio alcanzó los 250.000 nuevos enfermos diarios, reveló Voice of America (VoA).
La directora de los CDC, Rochelle P. Walensky, aconseja a la población: “No hay que bajar la guardia”. “Aún estamos en unos 100.000 casos diarios. Seguimos en aproximadamente 1.500 y 3.000 decesos al día. El número de infecciones es más de dos veces y medio a lo que registramos en verano”, comentó.
Hasta el momento ya se han distribuido más de 50 millones de vacunas. 37,1 millones de personas han recibido la primera, mientras que 13 millones ya se han inoculado ambas.
Aunque el número de contagios ha bajado sustancialmente, no pasa lo mismo con la cifra de decesos. En las últimas 24 horas, según el informe de los CDC, hubo 3.433 muertes, una cifra superior comparada con la media de fallecimientos diaria que se sitúa en unos 3.000 al día.
El país ha sufrido los estragos de tres olas de contagios.
Las variantes del coronavirus podrían provocar un cambio en las previsiones de los expertos sanitarios, especialmente porque se sospecha que son mucho más contagiosas que el Covid-19 original y, aunque aparentemente las vacunas son también efectivas contra esas mutaciones, no hay una certeza absoluta de que se pueda combatir de una manera más o menos rápida.
Entre las cepas que más preocupan a los médicos está la B.1.1.7 que es muy contagiosa y que se detectó por primera vez en Reino Unido. Hasta el momento se han reportado 1.100 casos en varios estados de Estados Unidos y la mayor parte en Florida. Sin embargo, estas variantes son difíciles de detectar ya que se requiere un examen mucho más exhaustivo que se realiza en laboratorios especiales.